Sueño de una noche de verano: Elena
Sueño de una noche de verano: Elena
Esta actividad consistió en redactar la obra “Sueno de una noche de verano” desde el punto de vista de uno de los personajes. En nuestro caso, el personaje que se nos designó fue Elena. Primero tuvimos que debatir como íbamos a organizar la historia y tuvimos que repasar todas las escenas donde estaba presente Elena, para que a la hora de plasmarlo en papel no hubiera confusiones al leerlo. Tardamos toda la hora en redactar la historia pero no hubo grandes complicaciones. Esta forma de rendir es muy práctica , ya que cada grupo debía enfocarse en su personaje y así no se podían ayudar entre sí. Ahora pasemos a la historia:
Mi nombre es Elena, vivo en Atenas, y estoy perdidamente enamorada de Demetrio, un digno caballero de Atenas. Les voy a contar como en menos de un día, luego de muchas idas y vueltas, terminé siendo la esposa de mi hermoso Demetrio.
Entré a una habitación del palacio y me encontré a Lisandro y Hermia hablando. Hermia me confesó que la noche siguiente escaparía con Lisandro lejos de Atenas, por el bosque, debido a que el duque Teseo y su padre, Egeo, querían someterla a ser la esposa de Demetrio. Decidí decirle al mismo sobre esto e ir a buscarlo a la noche siguiente.
Llegado el momento, guié a Demetrio al lugar donde se suponía debían encontrarse Lisandro y Hermia. Tras buscar por un rato sin éxito, Demetrio se cansó de mis súplicas por su amor y me amenazó de muerte si no lo dejaba tranquilo, pero mi amor por él me impulsó a seguirlo tras él. En eso entramos a un claro y nos encontramos con los dos amantes dormidos, pero Demetrio sin verlos, se enfureció conmigo y se marchó.
Lisandro despertó, y al verme comenzó a llenarme de halagos y cumplidos de amor. Pensé que era una burla y me fui con Lisandro insistiendo tras de mí. Luego de aguantar al hombre llenándome de halagos durante un rato, llegamos a un lugar donde mi amado Demetrio descansaba. Despertó, y como si lo hubiese preparado con Lisandro, comenzó a confesar su amor también por mí.
Entró Hermia buscando a Lisandro, pero este la rechazó con desprecio y ella se enfureció conmigo por creer que hechicé el corazón de su amante. Lisandro y Demetrio se alejaron peleando por mí. Luego de un rato encontré a ambos durmiendo y me acosté junto a Demetrio, cansada por tanto lío.
Al despertar, estaban también Hermia, Egeo su padre, Teseo y su prometida Hipólita. Lisandro de vuelta enamorado de Hermia y Demetrio seguía reclamando mi corazón. Todo pareció haber sido un sueño, pero extraño, porque los cuatro recordábamos lo mismo. Teseo organizó una triple boda y fuimos a ver una obra teatral, hecha por unos artesanos del pueblo, contenta de haberme esposado con el amor de mi vida.
Fin
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